Trabajar de forma remota se ha convertido en una opción muy útil para muchas personas en los últimos tiempos. Según las estadísticas, esta “nueva” modalidad llego para quedarse y perdurará en las organizaciones. Esta nueva forma de trabajar ha transformado la vida de miles de personas en todo el mundo, ha sido un recurso fundamental para dar paso a la era digital y a un uso más flexible del tiempo.  Esta alternativa permite equilibrar las actividades laborales con actividades que generan satisfacción personal y familiar.

Así mismo, las personas que disfrutan del trabajo remoto han descubierto atractivas ventajas entre las que están: el ahorro del tiempo y dinero en los desplazamientos, compartir más tiempo con sus familiares y amigos más cercanos, e incluso trabajar más cómodo junto a sus mascotas. Sin embargo, lograr un balance entre la relación familiar y el trabajo remoto supone un gran reto, por ello.

Coloca en práctica.

Evita Distractores.

Busca un lugar lo más tranquilo posible donde se pueda concentrar al máximo, con ello logrará un enfoque en las actividades del día, en caso de no contar con el espacio haga acuerdos con su familia para no recibir ningún tipo de interrupciones, recuerde que su espacio físico no debe estar sobrecargado de objetos innecesarios.

Establezca horarios.

Delimite su horario de trabajo remoto como si estuviera en la oficina, organice descansos, hora de almuerzo y hora de desconexión; de esta manera, su jefe y compañeros de trabajo tendrán conocimiento cuándo comunicarse con usted y cuándo no. Es importante colocar límites entre la vida personal y el trabajo remoto.

Desconéctese

Dedique un espacio para usted y su familia luego de un largo día de trabajo, realice actividades como leer, tomar un curso, tomar un café, ver una serie o tal vez una película, recuerde que los momentos de ocio total también le permitirán una mejor conexión con sus seres queridos y con sus mascotas, intente no usar aparatos tecnológicos con el fin de descansar de los quehaceres laborales y de la tecnología. Por último descanse. ¡Recargue baterías para continuar al día siguiente!

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